Estado de la Naci�n

| Rafael Estrella

port Sin duda, es el debate más importante del año. El pasado, pese a que las encuestas posteriores dieron a Rodriguez Zapatero como claro vencedor, me resultó pesado, bajo de pulso, tedioso en ocasiones.

Hoy, en el arranque del debate Zapatero ha hecho, para mí, uno de sus mejores discursos en esta Legislatura.

Ha comenzado con una muy potente invocación de lo que hoy es España: «la España real, de lo que es España ahora y de lo que podemos hacer que España sea en el futuro».«un país en intensa transformación, en positiva transformación. Es un país que no puede ser comprendido con los viejos esquemas, un país que no puede ser gobernado con las rutinas tradicionales, un país que necesita nuevos instrumentos, nuevas políticas, nuevas reglas institucionales, un gran país en un momento de grandes oportunidades que los ciudadanos no quieren perder, que los ciudadanos no van a perder»..

Esa reafirmación de la España que Rajoy ignora o desprecia es importante, porque pone en evidencia quién confía en España y en los españoles, quien apuesta por construir, por afrentar unidos y con determinación los retos del presente y del futuro, y quien ha optado por la crispación, el temor y el enfrentamiento.

El resto de la intervención, muy bien trabada, sin ocultar los problemas y dificultades, ha puesto de manifiesto , con datos y cifras, el contraste entre los resultados de la política del Gobierno socialista en los distintos ámbitos y los de los gobiernos del PP.

En suma, me ha gustado.

Ahora, Rajoy pregona el apocalipsis desde la tribuna y, algo nuevo, se erige en defensor de las libertades del ciudadano (¿está ya mirando de reojo a Esperanza Aguirre?). Como le acaba de decir Zapatero a Rajoy: «ustedes son profetas del desastre y un desatre como profetas».

Esta noche o mañana, más.

Intervención de Rodriguez Zapaterio en el debate del Estado de la Nación (30 de mayo 2006)

6 Responses to Estado de la Naci�n

  1. Diego Cruz says:

    Los asesores de imagen de Mariano tienen que trabajar un poco más a partir de ahora. Un país que progresa, con una política social que no se producía en otro tiempo y una economía que va viento en popa, no puede ni quiere permitirse el discurso anacrónico y crispado de una derechona que, como la Iglesia, están obligadas a renovarse.

  2. miguelnr says:

    Por fin!, lo que muchos llevabamos pidiendo hace mucho tiempo: que volviera al tipo de discurso del 2001, en donde todos los medios de comunicación reconocieron que quien ganó fue Zapatero, porque habló realmente del Estado de la Nación, es decir, de los problemas reales de la gente de la calle.

    Ya se empezó a notar la progresiva rectificación de Zapatero con el Estatuto de Andalucía: le dedico el tiempo y el esfuerzo justo, formalmente impecable, pero sin entrar en grandes diatribas, porque la cuestión ya está muy clara, quien quiere reformar y quien no, quien quiere pactar y quien no.

    Cuanto menos tiempo le dedique públicamente al tema de los Estatutos de Autonomía y de ETA, mejor, cuanto más se lo dedique a la economía y el Estado de Bienestar, mejor, porque ese, y no otro, es el lugar común de todos los españoles, en donde los españoles normales (como le gusta decir a Rajoy) se encuentran, y en donde, un español de Tarragona y un español de Cáceres, pueden encontrarse, tienen un discurso común: todo el mundo necesita un empleo, todo el mundo necesita atención sanitaria, todo el mundo necesita educación, etc…

    Es lo que hacía Felipe González; reducir su enunciado sobre su visión de España a cuatro o cinco proclamas, posicionamientos paradigmáticos que dirigen el rumbo de su Gobierno, pero nada más, ¿el resto?, España y los españoles.

    Está claro que la inmensa mayoría de los españoles, incluídos los representados por Piqué, Jaume Matas, los que votaban a Manuel Fraga, y todos los que votan al PSOE, se sienten más reflejados con la visión de una España plural, porque todos hemos viajado por toda España como turistas, conocemos nuestro propio país, sabemos que no en todas partes se habla español, sabemos, desde hace tiempo, que la España real es la España de los ciudadanos, la España que vive la gente normal y corriente de la calle, que no está politizada, que no piensa en términos de carnet, que no se siente mal por conocer otras culturas dentro de su propio país, las considera una riqueza, no un problema, y le gusta, porque le gusta España y porque se sienten orgullosos de ser españoles.

    Esa es la España normal, y por eso no hay que dedicarle mucho tiempo en explicarla, porque es obvia por si misma, y un Presidente no la va a cambiar.

    Eso es ser realmente liberal; dejar que los individuos se organicen como quieran. Rajoy parece Fidel Castro, intentando explicar como tienen que ser los españoles, eso es una tontería, ya la pregunta es una estupidez; se puede expresar en lo que crees, y siempre he dicho que es bueno porque ayuda a definir tu estrategia y a clarificar tu posición, y eso ayuda a eliminar desasosiego, pero el debate en el que nos quiere meter el señor Rajoy es de psiquiátrico, y no tiene ningún sentido.

  3. miguelnr says:

    Me ha gustado menos la segunda intervención de Zapatero, se ha metido de lleno en el tema de los Estatutos, y todavía no tiene un mensaje claro sobre estos, un discurso corto y contundente que consiga resumir su concepción de España … es decir, una idea de España.

    Se ha notado que Rajoy le ha ganado algo de ventaja, aunque en mi opinión Rajoy lo está haciendo tan rematadamente mal, que es dificil no superarlo.

    Se ha puesto incluso a recordar la época en donde el PSOE propuso la República para España … que pena que Francisco Vázquez esté tan lejos… seguro que se hubiera indignado si hubiera escuchado ciertas cosas, y le hubiera leido la cartilla de la historia a más de uno.

    Zapatero podría haber rebatido muchas más cosas del discurso de Rajoy, que ha sido completamente horrible porque ha deformado muchas cosas, ha descontextualizado en otras y en el resto directamente ha mentido, y él lo sabe.

    El discurso de Rajoy ha sido … histérico, atropellado y sin una idea central.

    Parece un «quejica», alguien que viene allí a quejarse, no a proponer, a criticar y a fundamentar sus posiciones en ningún razonamiento, porque lo cierto, es que nadie ha sido capaz de decirme que Rajoy haya argumentado nada y haya propuesto menos.

    Nadie conoce que piensa Rajoy sobre la economía, sobre la inmigración, sobre la seguridad… ¿cual es la alternativa de Rajoy?, o mejor dicho… ¿la tiene?.

    Parece que Rajoy ha conseguido arrastrar a Zapatero, en el último momento, a un debate de besugos, de meras contra-replicas, en vez de un debate sustancialmente político, con una idea clara de España y con un desarrollo magistral de las políticas que se hacen en España… siguiendo un poco la linea de la primera intervención de Zapatero.

    Es una pena, parece que en España ya no se hace un debate de calidad.

    El follón del PP con los turnos ha sido deplorable.

  4. FELIPE says:

    No creo que se hablara de los problemas reales de la Nación: la negociación con ETA, la reforma constitucional encubierta hacia un modelo confederal. Sí se habló de la inmigración, pero mientras uno se dedicaba a echarle la culpa a los anteriores gobiernos y afirmar que lo va a solucionar (al igual que el problema del agua), el otro criticaba pero no ofrecía alternativas ni soluciones. ¡Qué pena de debate!

    De los otros problemas: vivienda (desaceleración de los precios gracias al Ministerio de Vivienda, igual que los 1.500 contratos de alquiler gestionados por los 3.000 funcionarios -en una empresa privada estarían todos despedidos-; inseguridad ciudadana…tiene gracia que como consecuencia de las transferencias a las CCAA y de un mayor autogobierno, la solución sea enviar a la Guardia Civil, que el gobierno catalán había echado con anterioridad. Ahí el Gobierno ha estado rápido y ágil; o el anuncio de que va a resolver para siempre el problema del agua…

    De parte del pancartero del PP. Estoy de acuerdo con miguelnr en que Zapatero no logró resumir su concepto o su idea de España, pero…¿la tiene?. Me gustaría saber cuál es. Respecto a lo que dijo por la mañana y que tanto le ha gustado a D. Rafael, eran tales generalidades que podría estar hablando de Francia, Alemania o cualquier otro país.

    Sólo hay una cosa, entre todo lo que dijo el Presidente que no pega con el tono de su discurso: dio por hecho que CiU gobernará en Cataluña. ¿Fue un lapsus?¿Es adivino?¿O esa es la condición del Pacto Zapatero-Mas?

    Mis queridos amigos, cada vez veo más claro la relación entre las negociaciones con ETA y las reformas estatutarias como consecuencia de las conversaciones de Eguiguren y Carod con ETA. Sólo le deseo suerte al Gobierno y que no ceda en aquellas cuestiones que puedan dañar la dignidad de los españoles. Y que el PP se ponga las pilas, haga una depuración entre sus filas y ofrezca alternativas que ya es hora. Alea jacta est!